¿Servidores en tu oficina?
La semana pasada recibí una llamada de un nuevo cliente conforme necesitaba un perfil específico para el área de TI. Al preguntarle sobre las funciones que debía desarrollar y el proyecto, me dibujó un escenario tecnológico de hace, por lo menos, 10 años. ¡Y la empresa es líder en el sector!
Este post va dedicado a todas aquellas personas que tienen un servidor puesto en su oficina (sea start-up o no) detrás de un ADSL o conexión parecida.
La velocidad y seguridad es lo que premia
Una conexión a un servidor interno (en tu oficina) es realmente elevada desde cualquier dispositivo que se conecte a él desde la propia red de la oficina. Conectar a 100 Mbps (o a Giga, dependiendo) es realmente rápido y una justificación si tienes entornos de desarrollo dentro de tu propia oficina o documentación compartida que necesitas “como si” estuviera en tu dispositivo local. También “tienes el control” de los datos porque los tienes en tu oficina…
Déjame que haga una reflexión sobre estos aspectos para acabar de decidir si es una buena idea tener el servidor en tu oficina.
La velocidad
En el momento en que tenemos dispositivos móbiles o portátiles con comerciales, desarrolladores, directores… que deben conectar al servidor desde fuera la oficina, la alta velocidad de la conexión interna se vuelve en tu contra y quedas limitado a la velocidad de “bajada” de la conexión (ADSL seguramente) de tu oficina ¡y al uso interno que paralelamente se le esté dando!
En el momento que cae la conexión, cae el acceso. Puedes replicar una salida por satélite para el caso en que caiga el acceso habitual o, incluso también, tener un balanceo de carga. Pero te has preguntado, ¿a qué precio? ¿qué riesgo tengo en el caso de no tener tolerancia a ciertos fallos que se puedan dar?
Seguridad
Para mi, tener el control de los datos (códigos fuente, documentos, etc.) en tu propio servidor, es una sensación. Si la salida a internet de la oficina tiene conexión con el servidor, éste, es vulnerable a internet. Entiendo que no tienes una DMZ preparada para ello…
Pero también existe otro tipo de seguridad que para mi incluso, a veces, es mucho más fácil de vulnerar. ¿Quién puede acceder de forma física a la habitación del servidor? ¿Está regulado, controlado y vigilado el acceso?
Y finalmente, otro tipo de vulnerabilidad es acerca de quién puede conectar al sistema inalámbrico. ¿Tienes una red separada para los dispositivos inalámbricos que se conectan a la oficina? (sobre todo si no son de empleados).
Actualmente existen metodologías de trabajo que permiten trabajar de forma remota sin tener que penalizar la velocidad (DevOps tiene algunos ejemplos prácticos).
También existen alternativas en el mercado que te ayudan a contratar:
- Buenas conexiones a internet
- Servidores en datacenters cercanos para tener un buen tiempo de respuesta a todos los niveles
- Sistemas de seguridad en la nube que permiten tener redes en la nube como si fueran locales.
Puedes echar una ojeada a los servicios ofrecidos por Amazon AWS, por Azure o por Rackspace, por ejemplo. ¿Ves en sus servicios reflejada la infraestructura de red y servidores de tu oficina?
¿Y si tengo la infraestructura en armario de un ‘datacenter’? Te propongo que escales los conceptos de este post y me comentes tus conclusiones.